Conclusión final
La Educación Plástica y Visual siempre ha sido relegada a un segundo lugar en el "ranking no oficial de asignaturas" (e incluso en el oficial). En mi escuela, cuando no nos daba tiempo a terminar el temario de matemáticas o de lengua, mi profesora utilizaba las horas de plástica. Pero tenemos que darnos cuenta de que estas horas son tan necesarias como las que más. Vivimos rodeados de imágenes, nuestro sentido de la vista vive bajo una continua cascada de estímulos. Por ello es sumamente importante que los niños y niñas aprendan a interpretarlas y a crearlas, para poder entender el mundo en el que les ha tocado vivir y ejercer como miembros activos de la ciudadanía.
Una de los aspectos que más me ha llamado la atención de lo tratado este año es el tema de la originalidad. Me ha hecho reflexionar sobre la importancia que le damos en campos como la Educación Artística. Rechazamos la copia e incluso rechazamos la transformación de la copia, pero, ¿por qué siempre tiene que ser un valor?
Además, me he dado cuenta de que no hay nada totalmente nuevo. Siempre nos inspiramos en algo y tomamos esquemas existentes. Así pues, ¿por qué hemos de pedir a nuestros alumnos y alumnas que sean siempre creativos y originales cuando tratamos el tema del arte?
Puede que en casos concretos, nuestro objetivo sea la originalidad y la inventiva, pero siempre debemos tener en cuenta que la educación artística, como al de cualquier otro tipo, se ha de planificar pensando y escogiendo los objetivos que queremos conseguir. Esto me lleva a situarme claramente en contra del autoexpresionismo. No creo que la educación se deba improvisar; es algo que merece ser pensado dos veces.
Con respecto a nuestra asignatura,
creo que se nos da poco tiempo para asimilar muchas cosas. Yo tengo muchas incógnitas, muchas preguntas sin respuesta sobre el arte y sobre cómo enfocar la Educación Artística. Por otro lado, sé que esto tiene que ser así. El hecho de hacerse preguntas implica análisis y reflexión, y más aun cuando, como en el caso de la educación, no existe una respuesta ni una verdad absoluta. Este es un principio básico que debemos transmitir a nuestros alumnos y alumnas: "haced preguntas, haceos preguntas". Seguid siempre buscando respuestas, no os conforméis con lo primero que se os ocurra. Las imágenes se crean con una intención, y puede que tú no quieras ser cómplice de ello. Así pues, mírala dos veces.
Ahora, el trabajo está en nuestras manos. Nuestra formación no debe acabar aquí. Creo que la asignatura ha servido para encender una llama y aprender a mirar al mundo de forma diferente.
Nos cuestionamos leyes, nos cuestionamos literatura, pero casi nunca nos cuestionamos las imágenes. Las consumimos continuamente y sin embargo nos quedamos ahí. Ahora creo que todos miraremos las imágenes dos veces antes de creérnoslas y antes de llevarlas al aula. Todo transmite, no existe la posición neutral.
Una de los aspectos que más me ha llamado la atención de lo tratado este año es el tema de la originalidad. Me ha hecho reflexionar sobre la importancia que le damos en campos como la Educación Artística. Rechazamos la copia e incluso rechazamos la transformación de la copia, pero, ¿por qué siempre tiene que ser un valor?
Además, me he dado cuenta de que no hay nada totalmente nuevo. Siempre nos inspiramos en algo y tomamos esquemas existentes. Así pues, ¿por qué hemos de pedir a nuestros alumnos y alumnas que sean siempre creativos y originales cuando tratamos el tema del arte?
Puede que en casos concretos, nuestro objetivo sea la originalidad y la inventiva, pero siempre debemos tener en cuenta que la educación artística, como al de cualquier otro tipo, se ha de planificar pensando y escogiendo los objetivos que queremos conseguir. Esto me lleva a situarme claramente en contra del autoexpresionismo. No creo que la educación se deba improvisar; es algo que merece ser pensado dos veces.
Con respecto a nuestra asignatura,
creo que se nos da poco tiempo para asimilar muchas cosas. Yo tengo muchas incógnitas, muchas preguntas sin respuesta sobre el arte y sobre cómo enfocar la Educación Artística. Por otro lado, sé que esto tiene que ser así. El hecho de hacerse preguntas implica análisis y reflexión, y más aun cuando, como en el caso de la educación, no existe una respuesta ni una verdad absoluta. Este es un principio básico que debemos transmitir a nuestros alumnos y alumnas: "haced preguntas, haceos preguntas". Seguid siempre buscando respuestas, no os conforméis con lo primero que se os ocurra. Las imágenes se crean con una intención, y puede que tú no quieras ser cómplice de ello. Así pues, mírala dos veces.
Ahora, el trabajo está en nuestras manos. Nuestra formación no debe acabar aquí. Creo que la asignatura ha servido para encender una llama y aprender a mirar al mundo de forma diferente.
Nos cuestionamos leyes, nos cuestionamos literatura, pero casi nunca nos cuestionamos las imágenes. Las consumimos continuamente y sin embargo nos quedamos ahí. Ahora creo que todos miraremos las imágenes dos veces antes de creérnoslas y antes de llevarlas al aula. Todo transmite, no existe la posición neutral.